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Bienvenidos al fascinante universo de la microbiota intestinal, un tema que quizás no sea de conversación diaria, pero es vital para nuestra salud y bienestar. A menudo olvidamos que en nuestro interior vive un ecosistema complejo y delicado, crucial para mantenernos sanos y fuertes

ECBA (Enfermedad crónica basada en adiposidad) la gran pandemia del siglo XXI

Antecedentes

• Obesidad: enfermedad de origen inflamatorio crónico de bajo grado, almacenamiento de tejido adiposo, predispone a otras enfermedades.
• Macroambiente: antecedentes géneticos.
• Microambiente: evolución de la enfermedad.

¿Por qué hablar del intestino?

Las alteraciones gastrointestinales tienen una conexión entre si por ello su sintomatología es mixta y compleja porque desde que se altera la boca comienzan las modificaciones.

Se habla de intestino cuando…

• Las personas sufren malestares digestivos
• Pacientes con sintomas secundarios al consumo de un medicamento
• Sensibilidad alimentaria
• Enfermedades autoinmunes

Al mejorar la salud digestiva dicho diagnóstico tendrá un mejor control.

¿Qué es la Microbiota Intestinal y cuáles son sus Funciones?

La microbiota intestinal se refiere a los billones de microorganismos, principalmente bacterias, que habitan en nuestro intestino. Estos microbios no son invasores, sino habitantes permanentes y esenciales. Realizan funciones críticas como ayudar en la digestión de alimentos que nuestro cuerpo no puede procesar por sí solo, producir vitaminas esenciales y fortalecer nuestro sistema inmunológico. Actúan como un verdadero “órgano” dentro de nuestro organismo, influyendo incluso en nuestro estado de ánimo y comportamiento.

Factores que Afectan Nuestra Microbiota:

La composición de nuestra microbiota puede ser alterada por varios factores, incluyendo la dieta, el uso de antibióticos, el estrés, la falta de sueño y el estilo de vida.

Disbiosis y Permeabilidad Intestinal:

Cuando el equilibrio de nuestra microbiota se perturba, se produce una condición llamada “disbiosis”. Esto puede llevar a una “permeabilidad intestinal” aumentada, donde las barreras del intestino se debilitan, permitiendo que sustancias potencialmente dañinas pasen al torrente sanguíneo. Esto se asocia con una variedad de problemas de salud, desde trastornos digestivos hasta enfermedades autoinmunes.

Identificación y Factores de Riesgo:

Síntomas como hinchazón, gas, diarrea o estreñimiento pueden ser señales de problemas en nuestra microbiota. Los factores de riesgo incluyen una dieta pobre, el abuso de antibióticos, y un estilo de vida sedentario.

Enfermedades Intestinales y Alteraciones Digestivas:

La disbiosis está vinculada a enfermedades como el síndrome del intestino irritable, enfermedad inflamatoria intestinal, y alergias alimentarias.

El Poder de los Probióticos y Simbióticos:

Los probióticos son microorganismos vivos que, al ser consumidos en cantidades adecuadas, benefician nuestra salud intestinal. Se encuentran en alimentos fermentados como el yogur, el kefir, y el chucrut. Los simbióticos, por otro lado, combinan probióticos y prebióticos (alimentos que alimentan a nuestras bacterias buenas), ofreciendo un enfoque doble para mejorar la salud intestinal.